La vida tiene curiosos caminos y rumbos y muchos son los senderos que desde la introspección de las dudas que nos invaden y ahí está la música que sirve como elemento de fe. El rock and roll ha servido y sirve para mostrar los matices de fervor y que llevan hacia la fe y a espiritualidad.
Muchos artistas han sido los que han empleado esta vía para redimir almas y alentar el espíritu de la fe entre ellos están U2 con canciones emblemáticas como “Yahweh”, “Grace” o “Gloria”.
Otros como Patti Smith, madrina del punk ha llegado a afirmar que la “musica es la comunicación directa con Dios”.
Hoy quiero centrarme en otra estrella del comprimoso y del amor hacia los seres humanos que amaba la música y que le servía de cauce para ayudar a los demás y hago referencia al párroco zaragozano que ha muerto por las heridas y las quemaduras que sufrió a causa de una vela que prendió su casulla.
Javier Sánchez , capellán del hospital Royo Villanova y vinculado con el mundo cofrade de Zaragoza , párroco de San Gregori y consiliario de la Cofradía de Humildad.
Una persona excepcional, sincera, comprometida, entrañable y cercano. Como rockero tenía el mismo carisma que com persona y era un referente en Zaragoza y en Aragón. La noticia ha supuesto un dolor generalizado dentro de la población aragonesa y no ha pasado desapercibida a nivel de España.
Una persona atípica y especialmente altuista que celebrón un festival para ayudar a inmigrantes de Perú y Ecuador.
Llego a zaragoza en 1978, con apenas quince años y estudió en el colegio de Teresianas del barrio de Delicias. Venía de Madrid y su fe religiosa le llevó primero a Andalucía para regresar al barrio de Delicias, en donde estudio para ser párroco.
Un párroco que destacaba no sólo por ayudar a los demás sino por su capacidad de dar sermones, con su ejemplo fuera del altar por esa vocación que tenía por su labor misionera. Algo que llevaba a cabo por trabajar con una ONG de NIcaragua y a la que iba frecuentemente para ayudar en un entorno hostil para la fe pero sus ganas de ayudar a los más vulnerables desde una inmensa humanidad hacía que siguiese en la brecha en el camino de ayudar a los demás.
Tuve la posibilidad de hablar una pequeña charla en la primavera del 2022 y hablando de los problemas que sufría la sociedad con cada vez más personas vulnerables recuerdo su respuesta perfectamente que decía:
“Nuestra obligación como personas consiste en conseguir sueños imposibles. Tenemos la obligación como seres humanos de entrenar mente y espíritu para ser capaces de mantener la serenidad y la paz en mitad de las tempestades.
Es muy necesaria la oración pero no es menos necesaria la acción y la música tiene la utilidad de inspirar y ayudar al ser humano para comprender y descifrar nuestro corazón. La pobreza no está ahí para que la lleguemos a enterder, está para solucionarla”
Antes de despedirme recuerdó que comenté “ el día que no estés se te echará mucho en falta” y él con una sonrisa llena de humanidad me dijo:
“La verdad que cuando muera no quiero que me recuerden, que me dejen en paz ( con risas) que allá donde esté tendré mucho que hacer”.
Hoy ya no está entre nosotros y aunque no quería no podemos evitar seguir recordando su persona, su fé, su humildad y su musica.
José Luis Ortiz Güell
Nacido en Zaragoza el 11 de julio de 1967. Licenciado en Magisterio Universidad de Zaragoza. Máster en Hipnoterapia Clínica. Postgrado de Informática Universidad de Ingeniería de Zaragoza.
Como escritor he publicado dos novelas “Soledad: querida dictadura” (bajo pseudónimo) y Puente en la Niebla con mi nombre y que se pueden adquirir en Amazon. He escrito dos obras de teatro “Cena en Do”, una comedia y el drama “Sonido del Silencio”.
Pendiente de publicación de dos novelas “Los cardos también lloran”, sobre la violencia de género y la precuela de “Puente en la niebla”.
Columnista de diferentes medios de España e internacionales de reconocido prestigio, y que se le otorgó el Premio a la Excelencia Mundial Cesar Vallejo en la modalidad periodística.
Como actor y figurante he participado desde 1995 hasta la actualidad en diferentes películas de prestigiosos directores de cine como Vicente Aranda, Milos Forman, Ridley Scott o Ken Loach rodadas en España entre otros directores.